Los terribles problemas sociales y políticos que provocaron las políticas económicas lanzadas por Frondizi, culminaron con el sombrío golpe de estado de 1962, donde a pesar de las insistencias de Frondizi por no otorgar su renuncia, José María Guido asumió el poder ejecutivo como nuevo presidente de la nación.
El nuevo gobierno militar trajo consigo la política económica neoliberal antiinflacionaria, a pesar de que para 1962 los resultados económicos de la política de Álvaro Alsogaray habían reducido la tasa inflacionaria. No obstante habría que afrontar nuevamente en la historia el déficit en la balanza comercial, el agotamiento de reservas y la inestabilidad.
Federico Pinedo, como nuevo ministro de economía presentó un programa de ajustes en los que se tomaron medidas como la devaluación de la moneda, la reducción del gasto público y restricción de créditos. Prontamente se observó que los resultados no eran los esperados ya que evidentemente las medidas eran muy poco variables con respecto al periodo anterior más allá de la rigidez; y por ello en esta época de transición en la que se buscaba resultados inmediatos, se intercalaron periodos de políticas económicas similares por parte de distintos ministros de economía, pero todos con el mismo nivel despreciable de éxito.
Estadísticamente, se puede decir que el PBI disminuyo con respecto de la década anterior, la utilización de la capacidad manufacturera instalada decayó a menos del 55%, aumento el desempleo y los recursos del estado continuaron disminuyendo.
Claramente la inestabilidad política (Guido solo se veía apoyado por los militares) no permitió que se desarrollara un plan económico que permitiera revolucionar la política económica fallida que venía llevando la nación.
El nuevo gobierno militar trajo consigo la política económica neoliberal antiinflacionaria, a pesar de que para 1962 los resultados económicos de la política de Álvaro Alsogaray habían reducido la tasa inflacionaria. No obstante habría que afrontar nuevamente en la historia el déficit en la balanza comercial, el agotamiento de reservas y la inestabilidad.
Federico Pinedo, como nuevo ministro de economía presentó un programa de ajustes en los que se tomaron medidas como la devaluación de la moneda, la reducción del gasto público y restricción de créditos. Prontamente se observó que los resultados no eran los esperados ya que evidentemente las medidas eran muy poco variables con respecto al periodo anterior más allá de la rigidez; y por ello en esta época de transición en la que se buscaba resultados inmediatos, se intercalaron periodos de políticas económicas similares por parte de distintos ministros de economía, pero todos con el mismo nivel despreciable de éxito.
Estadísticamente, se puede decir que el PBI disminuyo con respecto de la década anterior, la utilización de la capacidad manufacturera instalada decayó a menos del 55%, aumento el desempleo y los recursos del estado continuaron disminuyendo.
Claramente la inestabilidad política (Guido solo se veía apoyado por los militares) no permitió que se desarrollara un plan económico que permitiera revolucionar la política económica fallida que venía llevando la nación.
En los primeros minutos de este video se habal de una política económica "hostil". Es decir, que vemos como no se pensó en los resultados sociales al presentar estos planes sino que se intentó imponesr un orden que dificilmente podría alcanzar a todos los argentinos. Pero dentro de todos los videos que pudimos encontrar notamos que el desorden político hace que sea dificil encontrar alguna crítica a nivel económico. No obstante, este video nos da el pie a comenzar a ver el contexto social y político de Illia para que luego podamos analizar el aspecto económico.
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